Medida de aseguramiento a José Miguel Narváez por asesinato de Jaime Garzón.

El fiscal general (e.) Guillermo Mendoza acaba de revelar que, en la investigación, José Miguel Narváez está sindicado como presunto determinar del homicidio. Narváez también está vinculado al escándalo de las ‘chuzadas’.

Garzón fue asesinado el 13 de agosto de 1999, en el sector de Quinta Paredes de Bogotá.

En declaraciones en Justicia y Paz, desmovilizados de los ‘paras’, como Jorge Iván Laverde, alias ‘el Iguano’,  señalaron a Narváez de haber instigado a Carlos Castaño para que ordenara el asesinato de Garzón.

El 11 de marzo del 2004, un juez de Bogotá condenó a Castaño a 38 años de prisión como responsable del homicidio del humorista. Dos meses después, en abril de ese año, el jefe paramilitar fue asesinado.

17 de junio del 2008, en una versión libre ante un fiscal de Justicia y Paz, el desmovilizado paramilitar Jorge Iván Laverde, alias ‘el Iguano’, afirmó que Narváez había «instigado» a el extinto Carlos Castaño para que ordenara el asesinato de Garzón.

La acusación de El Iguano

Alias ‘el Iguano’ dijo que Narváez mantenía un estrecho vínculo con Castaño y que viajaba a los campamentos de los paramilitares en Córdoba y el sur de Bolívar para dictar una cátedra que denominaba «Por qué es lícito matar comunistas en Colombia».

A Garzón lo asesinaron dos sicarios la madrugada del 13 de agosto de 1999, en el barrio Quinta Paredes de Bogotá. Ahora, la Fiscalía y también la Procuraduría investigan si desde un principio el DAS, del que Narváez era asesor externo, intentó desviar la investigación.

En este aspecto, uno de los detalles que llaman la atención de los investigadores es que después del crimen el organismo de inteligencia presentó a una supuesta testigo quien, a pesar de la oscuridad de la madrugada y de que los sicarios usaban casco, hizo una descripción de sus rostros para un retrato hablado.

Como autores materiales del asesinato fueron capturados Juan Pablo Ortiz, ‘Bochas’, y Edilberto Antonio Sierra, alias ‘Toño’. No obstante, el Juzgado Séptimo Especializado los absolvió, tras determinar que nada tenían que ver con ese crimen.

El único que ha sido sentenciado por la muerte de Garzón ha sido Carlos Castaño, a quien en el 2004 el mismo Juzgado Séptimo Especializado condenó a 38 años de prisión.

Otros ‘paras’ que han hablado en sobre el asesinato del humorista han sido ‘don Berna’ y ‘H.H.’ ‘Berna’ contó que Castaño le había pedido que le encargara del asesinato de Garzón a sicarios de la banda ‘La Terraza’.

Sin embargo, no dio más detalles del crimen porque en medio de la audiencia se desmayó. A su vez, ‘H.H.’ entregó la memoria USB de Castaño.

En uno de los documentos archivados en esa memoria, Castaño ratificó el crimen supuestamente fue un error y aseguraba que había dado la orden de perpetrarlo para «hacerles un favor a unos amigos del Ejército».

Enredado por las ‘chuzadas’ José Miguel Narváez ha sido uno de los funcionarios más polémicos de la inteligencia colombiana. Fue asesor del Ministerio de Defensa y de Fedegán.

Salió del DAS en el 2006, en medio de una dura pelea con el detenido Jorge Noguera en la que ambos se señalaban de tener vínculos con ilegales.

En el 2004 creó el G-3, el grupo de inteligencia que realizó seguimientos no autorizados y ‘chuzadas’ a periodistas y políticos de oposición.

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