El prolongado fenómeno de la niña y la intensidad de las lluvias en lo corrido del año, las altas tarifas de servicios públicos, las tasas de interés elevadas y la volatilidad del dólar, que nuevamente rosa los 5.000 pesos, son algunos de los factores que dispararon la inflación durante el 2022 en nuestro país.

De acuerdo con la directora del DANE, Piedad Urdinola, la variación de precios al consumidor ubicó a Cúcuta como la ciudad más cara, pues allí la inflación se ubicó en 16,34 por ciento, seguida por las siete capitales costeñas, en donde la carestía estuvo entre el 15,83 por ciento de Sincelejo y 14,26 por ciento de Santa Marta.

Las ciudades cuyo costo de vida subió pero que se mantienen como las más baratas son Bogotá (12,35), Manizales (12,61) y Medellín (12,75), en todos los casos los alimentos fueron los que más subieron de precios.

La carne, el arroz, las lentejas y las cebollas y el arroz son los productos con mayor carestía, impulsada ésta por el crudo y prolongado invierno y los altos costos de producción y procesamiento de alimentos.

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