La delegación norcoreana que asistirá al cierre de los Juegos Olímpicos de PyeongChang llegó este domingo este a Corea del Sur, encabezada por el general Kim Yong-chol y rodeada de un amplio despliegue de seguridad ante las protestas convocadas por esta visita.
La comitiva enviada por Pyongyang, de ocho miembros, llegó a territorio surcoreano por carretera sobre las 9.53 hora local (0.53 GMT) tras cruzar el puesto de control de Paju, en la Zona Desmilitarizada que separa a ambos países que permanecen técnicamente en guerra, según informó el Gobierno de Seúl.
La delegación permanecerá tres días en Corea del Sur y asistirá hoy a la ceremonia de clausura de los JJOO invernales, un evento en el que coincidirá con la comitiva estadounidense que encabeza Ivanka Trump, hija y asesora del presidente Donald Trump.
Kim Yon-chol, un alto cargo del régimen de 72 años, está inscrito en la lista de sancionados de Seúl por el papel que ha tenido en el desarrollo del programa nuclear y es considerado el cerebro detrás de dos ataques contra intereses del Sur acaecidos en 2010 y que dejaron 50 víctimas mortales surcoreanas.
Los partidos de la oposición surcoreanos y familiares de las víctimas convocaron protestas contra la visita en el puesto fronterizo por donde llegó la delegación norcoreana, y en las que exhibieron carteles y corearon lemas exigiendo la expulsión del país de Kim Yon-chol o incluso que se le arreste a su llegada.
El presidente surcoreano, Moon Jae-in, afirmó que ha aceptado la visita pese al rechazo mayoritario que genera en el país debido a que la considera un paso más en el proceso de «deshielo» entre Norte y Sur en el marco de los Juegos, y con el objetivo último de lograr la paz en la península de Corea.
«El Gobierno quiere centrarse en quién puede liderar un diálogo práctico para mejorar las relaciones intercoreanas y traer paz a la península de Corea, más que en quién hizo qué en el pasado», señaló el Ministerio de Unificación de Seúl en un comunicado.
La presencia de las delegaciones de EE.UU. y Corea del Norte en la ceremonia que se celebrará hoy en el Estadio Olímpico de la ciudad surcoreana de PyeongChang ha vuelto a alimentar las especulaciones sobre una posible toma de contacto entre ambas partes.
La misión norcoreana incluye a Choe Kang-il, un alto cargo diplomático encargado de las relaciones con Washington y quien ha defendido las aspiraciones nucleares del régimen en varios foros internacionales.
En la ceremonia de apertura de los Juegos del pasado día 9 se produjo un intento fallido de encuentro entre el vicepresidente estadounidense, Mike Pence, con una delegación norcoreana encabezada por Kim Yo-jong, la hermana del dictador Kim Jong-un.
EFE