Leishmaniasis, paludismo y una posible trombosis, fueron las enfermedades que padecieron los tres oficiales de la Policía que fueron rescatados por el Ejército el pasado domingo.

Aunque las autoridades médicas aseguran que se encuentran en buen estado de salud, a los tres rescatados les practican varios exámenes para saber si estas enfermedades dejaron secuelas graves.

Según el Subdirector científico del Hospital Central de la Policía, mayor Benjamín Reyes, el general Luis Mendieta sufrió varios episodios de Leishmaniasis cutánea y de paludismo, ambos tratados en la selva con medicamentos y en este momento se está analizando si todavía hay presencia de la enfermedad en su organismo.

El mayor Reyes también explicó que el general pudo haber sufrido de una trombosis o una tromboflebitis, que consiste en alteraciones de los vasos sanguíneos o arterias en sus miembros inferiores, lo que ocasionó que durante varios días de su cautiverio no pudiera caminar.

«Tuvo una afectación de miembros inferiores que lo afectó en su movilidad, sospechamos que haya sufrido una afección vascular y estamos en estudios imagenológicos vasculares para descartar alguna enfermedad en la parte venosa» , señaló el mayor Reyes.

El Director Científico del Hospital Central expresó que es muy complejo definir las causas de esa enfermedad vascular.

«Sencillamente tenemos lo que él refiere que sucedió. Es complejo atreverse a decir qué pudo haber sucedido, es difícil, pero sospechamos que haya sido una trombosis venosa o una tromboflebitis y esto puede derivarse de algún trauma», agregó.

El mayor Reyes informó también que el general Mendieta presenta una laringitis aguda por usar en exceso su voz durante todos estos días después de su secuestro, pero ya se encuentra en tratamiento.

Con relación al coronel Luis Enrique Murillo, explicó que también presentó eventos de leishmaniasis y paludismo, y que en este momento padece de trauma en tejidos blandos en sus extremidades debido al operativo de rescate.

También expresó que tiene cicatrices y una lesión «de lo que fue la mordedura de un reptil» , explicó el mayor Reyes.

El coronel Murillo también presentó una hectoparasitosis cutánea por ácaros y un dolor abdominal probablemente relacionado con una úlcera péptica.
Por su parte el teniente coronel William Donato, tiene traumas de tejidos blandos relacionados con golpes y caídas que pudo haber sufrido en el operativo de rescate, pero «ninguno que revista importancia o gravedad».

También presenta la ruptura del cuarto dedo de la mano izquierda que ya fue manejada con férula por el cirujano de turno.

«Tiene una hipoacucia al parecer por trauma acústico derivado al parecer de la toma de Mitú en 1998, y un escotoma de ojo izquierdo, es decir, una mancha en el campo visual del ojo izquierdo que también será tratado por el oftalmólogo», añadió el mayor Reyes.
Ocho días permanecerá hospitalizado el sargento Arbey Delgado

Así lo informó durante el primer parte médico el director del Hospital Militar Central, general Ricardo Gómez, al referirse al estado de salud del sargento mayor Arbey Delgado Argote, luego de que se determinará que durante su cautiverio padeció 10 enfermedades propias del trópico, por lo que es necesario continuar con las evaluaciones físicas y psicológicas del uniformado.

“El sargento mayor Arbey Delgado sufrió 10 enfermedades propias del trópico, 7 paludismos, 2 lesmaniasis y 1 dengue”, afirmó Gómez.

Agregó que el sargento mayor Delgado se encuentra en general bien, sin embargo él, al igual que su familia, continúan en constante evaluación y tratamiento psicológico, ya que luego del impacto tan fuerte que han sufrido es muy importante su recuperación en este aspecto.

Author Signature
Redacción Minuto30

Lo que leas hoy en Minuto30... Mañana será noticia.

  • Compartir:
  • Comentarios

  • Anuncio