Kranj (Eslovenia), 5 feb (EFE).- Primero fueron los Estados, a través del Marco Global de Ética para la Inteligencia Artificial (IA), y este lunes fue el sector privado: la Unesco logró que 8 multinacionales tecnológicas, entre ellas Telefónica, se comprometan a un desarrollo "responsable" de la IA en el foro internacional que celebra hoy y mañana en Eslovenia.

La IA ha planteado una revolución del mundo tal cual lo conocemos: "Todo ha pasado en una noche", dijo el vicepresidente de Eslovenia, Luka Mesec, en referencia a la rapidez con la que se están produciendo desarrollos tecnológicos derivamos de ella, en la inauguración del II Foro Global sobre la Ética de la Inteligencia Artificial.

Audrey Azoulay, la directora de Unesco, subrayó que en esta organización se podrían haber mantenido como "meros espectadores de esta revolución, pero por los desafíos éticos que plantea decidimos convertirnos en uno de los actores más activos", apostilló.

Tras adoptar un Marco Global de Ética para la IA para sus 194 Estados miembros en 2021, la Unesco venía trabajando con las grandes multinacionales tecnológicas para que hicieran suyos los preceptos para una IA responsable.

Sus negociaciones han dado los primeros frutos este lunes en Eslovenia: representantes de Microsoft, Salesforce, Telefónica, Lenovo, Motorola, GSMA, INNIT y LG suscribieron un compromiso para "cambiar el panorama de la gobernanza de la IA", mediante el que se comprometen a incorporar los valores y principios del marco de la Unesco en el diseño y despliegue de sus propios sistemas de IA.

Pese a sus ventajas, las tecnológicas reconocen que la IA presenta "grandes riesgos" entre los que citan: el aumento de las desigualdades, la generación y difusión de desinformación, la incitación al odio y a la violencia, la promoción de la discriminación por motivos de género o raza.

También la violación de la intimidad, la falta de respeto a la propiedad intelectual o la erosión de normas democráticas que tanto ha costado construir.

"Debemos crear un ecosistema de incentivos, inversiones y herramientas de gobernanza ética, tanto a través de la acción pública como privada", insistió Azoulay.

 

Observatorio y red de expertos de la IA

En esta línea, la Unesco presentó en Eslovenia dos nuevas herramientas para avanzar hacia un desarrollo más ético de la inteligencia artificial.

Por un lado, un observatorio donde expondrá qué regulación y medidas de control están poniendo en marcha los 194 Estados miembros de la organización para asegurar que la IA es aliada de los derechos de la ciudadanía y no promotora de la violación de los mismos.

El observatorio, accesible ya a través de una página web, pretende ser un "espejo que evidencie lo que hace cada país para proteger los derechos de los ciudadanos en esta materia", declaró a EFE la mexicana Gabriela Ramos, subdirectora general de Ciencias Humanas y Sociales de la Unesco en su presentación.

La segunda iniciativa es una Red de Expertos sin Fronteras de Ética de la IA, que Unesco pondrá a disposición de los países para que puedan consultarles a la hora de poner en marcha medidas de regulación y control ético de los desarrollos tecnológicos a nivel nacional.

Precisamente, del trabajo que están haciendo en sus países en esta materia hablaron hoy en el Foro cerca de 50 representantes de los 194 Estados Miembros de Unesco.

En nombre de España intervino la secretaria de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial, Mayte Ledo, quien destacó que este encuentro es una oportunidad de actualizar el compromiso "con el desarrollo de una IA ética y responsable, fomentando la transparencia, el conocimiento y la responsabilidad".

Ledo abogó por "capacitar y empoderar" a las personas en los beneficios y riesgos de la inteligencia artificial, así como en exigir la máxima transparencia a los desarrolladores.

Por: EFE

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