Este domingo 11 de marzo tendremos la oportunidad de enderezar el rumbo del país perdido en el 2010 cuando engañados, elegimos al peor exponente de la política en Colombia en toda su historia que en el 2014 continuó con el despojo de la democracia, hecho que culminó con el desconocimiento del resultado del plebiscito del 2 de octubre de 2016.

Corremos riesgos con altas probabilidades de ocurrencia de caer en manos de la nueva corrupción latinoamericana conocida como el SOCIALISMO DEL SIGLO XXI, cuyos síntomas ya los hemos vislumbrado con el cartel de la toga, los sobornos de Odebrecht, la venta de Isagén, el escándalo de Reficar, las cortinas de palacio, los puentes que se caen, la adjudicación del Canal 1 y todas esas numerosas muestras de la enfermedad que acompaña a esos carroñeros que se disfrazan de impolutos, como las famosas exministras ahora disfrutando de libertad en el extranjero cuando deberían estar aquí pagando por sus fechorías.

Muchos de los mayores exponentes del carrusel de la mermelada se atreven a exponer su nombre para repetir en los cuerpos colegiados; en verdad creo que los colombianos que tengan un mínimo de decencia y algo de inteligencia, les darán sepultura política a estos especímenes de la podredumbre política que se adueñó en estos últimos ocho años de las diversas ramas del poder público. Apoyar a quienes se enriquecieron en estos 8 años, usufructuando de la mermelada que a manos llenas repartía el ejecutivo para conseguir el apoyo de personas sin escrúpulos y cuyos principios de venden por una untada, es un suicidio (Auto suicidio según su ídolo).

Creo firmemente que quienes se prestaron para orquestar este desgobierno, apoyaron desde el congreso acciones en contra del pueblo, como fue el incremento del IVA al 19% que paralizó en grado sumo al comercio y afectó la calidad de vida de gran parte de la población, se plegaron al famoso fast track que quiso imponer unos acuerdos de impunidad en contra de la voluntad popular, no deben ser apoyados con el voto del pueblo colombiano; por el contrario deben ser reos de juicio por traición a la democracia y a la patria.Como reacción a esas prácticas dictatoriales se han originado rechazos violentos hacia personas que en vez de estar haciendo política deberían estar purgando condenas extensas en el tiempo debido a sus crímenes de lesa humanidad incluidos aquellos que fueron amnistiados hace rato como es el caso de algunos integrantes del M-19.

Esas personas en compañía de los jubilados del narcoterrorismo deben estar recluidos en diversos penales y repartidos por todo el mundo purgando condenas puesto que sus acciones son catalogables como crímenes de lesa humanidad. Robarse los recursos de la salud es un atentado en contra de los enfermos. Uno solo que muera debido a esa falencia de recursos es un crimen imputable a quienes se lucran con ese robo.

Estas son solo unas cortas reflexiones que hago antes de decidir mi voto. De hecho me ayudan a discernir y decidir por quien no voy a votar; no votaré por ningún candidato que milite o sea apoyado por: Partido Liberal, “U”, Cambio Radical, Narcoterroristas, Polo, Verde, Colombia humana, Mira, Opción ciudadana y esos que se venden al mejor postor incluidos en la lista algunos conservadores que prefieren mermelada y puestos.

¿Entonces por quién votar? Votaré por la oposición al actual régimen pues no quiero cohonestar con la destrucción de una nación que ha sido capaz de soportar el accionar narcoterrorista de unos pocos facinerosos, que en vez de encarcelados fueron premiados por un individuo y su camarilla de corruptos; estos últimos en un país decente estarían por fuera del poder y en juicio por indignos.

Hay un solo partido que no ha sido contaminado por esa mancha putrefacta de la coima, el soborno y la empegotadora mermelada y por ese depositaré mi voto con suma satisfacción para conseguir un triunfo abrumador que nos llene nuevamente de esperanza como la que conseguimos en el 2002 y perdimos en la segunda mitad del 2010. Votaré convencido de que mi elección es la más conveniente para Colombia, por eso buscaré el logo del CENTRO DEMOCRÁTICO y el candidato de mi predilección, a su vez pediré el tarjetón para la gran consulta por COLOMBIA y marcaré al candidato del partido.

Postre: La mentalidad de servicio debe primar sobre el deseo de reconocimiento y el poder inherente a esas altas posiciones.

Pluscafé: Matador el cerdo, se hizo un autoretrato con la imagen de la caricatura que le hizo a IVÁN DUQUE MÁRQUEZ.

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Redacción Minuto30

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