Madrid, 4 jul (EFE).- En los últimos 20 años los glaciares en los Alpes han perdido un 17 % de hielo a causa del calentamiento global, fenómeno que en los últimos días ha provocado una ola de calor en Italia con temperaturas muy altas y que estarían entre las causas del desprendimiento del glaciar en la Marmolada (Italia) que ha dejado seis muertos, nueve heridos y veinte desaparecidos.
«En los últimos 20 años los Alpes han perdido un 17 % de hielo y dos terceras partes de los glaciares han perdido volumen, lo que supone entre unos 0,70 y 1,70 centímetros», ha explicado a EFE el profesor de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) Raúl Martín Moreno.
Junto al calentamiento y el cambio climático confluye el turismo masivo en los Alpes a zonas «donde hace 50 o 70 años no se llegaba», ha asegurado Martín Moreno.
Según el investigador del Clima de la UAM, los glaciares son «siempre inestables, pero no en este volumen», pero en estos días se registra en Italia una ola de calor de sur a norte del país, con temperaturas en la Marmolada de 10 grados o más, lo que provoca que «la montaña sea más inestable y tenga pérdida de solidez».
Martín Moreno ha señalado que la cobertura de glaciares con lonas para evitar la pérdida de hielo como se hace en Suiza «no es una solución real» porque el glaciar de la Marmolada donde ha sucedido la tragedia tiene 3 kilómetros cuadrados y existen otros de 20 kilómetros cuadrados de longitud.
Por su parte, el especialista en cambio climático de Ecologistas en Acción, Javier Andaluz, coincide con Martín Moreno en que estos fenómenos como el sucedido en la Marmolada se van a producir con «mayor intensidad» porque el retroceso de los glaciares «no es un proceso nuevo, estamos experimentando de una forma clara y acuciada no solo en Italia, sino también en España, por ejemplo en los glaciares de los Pirineos que han ido retrocediendo a lo largo de los últimos años».
Existe una «aceleración de la temperatura» en la zona donde se ha desprendido este glaciar de Italia, donde se alcanzaba una temperatura de diez grados, ha señalado también Andaluz, quien ha añadido que se están registrando «unas máximas que cada vez son más máximas, en un proceso consecuencia del cambio climático que se irá incrementado con fenómenos catastróficos, con un problema como el desprendimiento de los glaciares que tienen su función ecosistémica, pero también con rápidos deshielos que podrían tener graves efectos sobre poblaciones que están sometidas a esos riesgos de glaciares».
Esto supone una pérdida de reserva de agua que el glaciar va liberando en el verano, pero también un aumento de la escorrentía por el deshielo que podría provocar graves inundaciones, ha añadido el técnico de Ecologistas.
Los glaciares «son impredecibles», se pueden desprender grandes trozos «sin que den señales previas de que esto está sucediendo, lo que se debería estudiar», según Andaluz.
La desaparición de los glaciares en los Alpes y en los Andes «es un proceso irreversible y muchos de ellos dejarán de existir para finales de siglo», según los geólogos Jérôme Chappellaz y Carlota Escutia Dotti.