Esfuerzo común para derrotar la corrupción

Luego de conocerse los resultados de la consulta anticorrupción del pasado 26 de agosto, la que a pesar de no haber pasado el umbral se tuvo como un verdadero éxito, el presidente de la república citó a palacio a todas las fuerzas políticas del país para llegar a consensos sobre un tema crucial, de total importancia y que a todos nos concierne como lo es la corrupción. Tales han sido el discurso y los esfuerzos de algunos partidos contra este mal, que lo han puesto como tema de primer nivel en la agenda nacional y es sobre lo que ha de ocuparse en la primera legislatura el nuevo congreso de Colombia, pues se han presentado proyectos de ley y se presentarán otros encaminados a combatir frontalmente la corrupción, que de verdad es un asunto que nos tiene cansados a los colombianos.

Dan escozor los detalles contados por el saliente contralor general, Edgardo Maya Villazón, quien hizo una labor seria y juiciosa en este organismo de control, que por la función desarrollada tiene pleno conocimiento: en los últimos años los corruptos se han llevado cerca de 50 billones de pesos, cifra superior y distinta a la dada a conocer por el estudio sobre el mismo tema por la Universidad Externado de Colombia, que la tasó en 9 billones.

Ofreció detalles de cómo se roban la plata de las regalías y de la alimentación escolar; de lo qué ha pasado con el Túnel de la Línea y con Reficar; que los porcentajes para la adjudicación de un contrato estatal asciende al 20% del valor del mismo; cómo las contralorías municipales y departamentales son otro foco de corrupción, y nadie mejor que él para dimensionar la cita llevada a cabo en el Palacio de Nariño, la que calificó de histórica, no solo por el asunto que se trató, sino porque como tal vez nunca todos los sectores políticos se sentaron a hablar el mismo idioma.

A nadie se le ocurriría negar el acto de madurez política de una reunión de semejante naturaleza y muy encomiable que el presidente de la república no se haya tomado el protagonismo y lo haya hecho una bandera del partido al que pertenece, sino que convocó a todos los sectores políticos, incluido el partido Farc.

Pero tal reunión debería tener un alcance mayor o la convocatoria de los diversos sectores políticos que se supone representan a los distintos electores y por lo mismo a unos segmentos importantes de la sociedad, ya que es del interés, no ya de algunos sectores, sino de la sociedad toda, que esos esfuerzos se dirijan también a hacer causa común para resolver otros problemas que tiene la nación. Es verdad que la corrupción desbordó todos los límites y que con todos unidos algo bueno tendrá que salir, lo que sucede es que se requiere de la misma unión para darle solución a otros asuntos.

En días pasados hemos visto que otros partidos políticos han llevado al congreso iniciativas sobre reformas a la administración de justicia como también en materia tributaria, lo deseable sería que de igual manera se dieran consensos frente a estos temas y otros, como medio ambiente, vivienda, empleo, salud, educación, cultivos ilícitos y seguridad, no solo estarían dotadas estas decisiones de la mayor legitimidad, sino se lograría que por fin viéramos los colombianos que todas las fuerzas políticas trabajan en favor de buscar soluciones a grandes problemas.

¿Será pedir mucho?