Deportivo Independiente Medellín es un digno subcampeón

Los antioqueños, bajo las órdenes del técnico Hernán Darío Gómez, fueron tomando fuerza con el paso de las jornadas, sin embargo, la curva de rendimiento decayó a mitad del torneo, por diversas razones y una de ellas, fue la sanción del entrenador, de cerca de ocho jornadas.

Sin el timonel en la raya y con jugadores sancionados y lesionados, Medellín mostró que está hecho de vísceras y que en el fútbol como en la vida misma, todo se consigue con perseverancia y empeño. La disciplina, el convencimiento de que había con qué, fueron situaciones que ayudaron a superar el camino espinoso.

A falta de dos jornadas para la culminación de la fase ‘Todos contra todos’ de la Liga Postobón, los rojos eran decimoprimeros con 20 unidades. Recibieron en casa a Junior, ganaron en los últimos minutos y ahí empezó la escalada a la final.

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Después, con cinco mil hinchas paisas a cuestas, fueron al Centenario de Armenia, jugaron de visita pero parecían locales puesto que la mancha fue roja en su totalidad. Arrinconaron a los hinchas locales y la fiesta fue suya. Los dirigidos por Edgar Carvajal y Nelson Gómez (en ese tramo del campeonato), cumplieron la tarea, regresaron a Medellín con un triunfo (1-3) y la clasificación asegurada a los cuadrangulares.

Con  26 unidades, Deportivo Independiente Medellín se instaló séptimo en la tabla de posiciones y se ubicó en el Grupo B junto a Itagüí, Nacional y Equidad. El camino en los cuadrangulares fue igual de difícil que en la fase previa.

Los antioqueños obtuvieron 11 puntos en el grupo y pasaron a la final, producto de tres partidos ganados, dos empates y una derrota. Pero tal vez los juegos de mayor recordación fueron los triunfos en los últimos minutos ante Nacional e Itagüí, juego que le valió para llegar a la final, luego de vencer 1-0 en el minuto 92 con gol de Ray Vanegas.

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Ya apostados en la instancia definitiva, en el juego de ida igualaron sin goles en el estadio Atanasio Girardot. Tal vez la baja más sentida fue la ausencia de John Viáfara, expulsado en el último minuto, razón por la cual no jugó en Bogotá.

En el juego de vuelta, los rojos le complicaron el camino a los azules. Con un hombre menos en gran parte del segundo tiempo, aguantaron la embestida azul, ratificando que tal vez su bloque defensivo, fue su mayor fortaleza a lo largo de la Liga Postobón.

Ya en las penas máximas, los visitantes no se resistían a la derrota y con un 5-4, por la atajada del penalti de Luis Delgado que cobró Andrés Correa, los rojos de Antioquia perdieron el título pero demostraron el por qué son llamados ‘Poderosos’.

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Los rojos quedaron con el sinsabor por perder el título, pero también, porque el puntaje global no les permitió llegar a los torneos internacionales de 2013. La fiesta para obtener la nueva estrella, quedó aplazada hasta una nueva oportunidad.

Fuente ligapostobon.com.co