A la especie humana se le está pasando la hora de actuar, si no quiere acabar con su propia descendencia y el planeta tal cual como lo conocemos. Cada día llegan más evidencias del calentamiento que se está sufriendo, hoy el Ártico tiene temperaturas más altas de lo normal y ha llegado a un volumen mínimo de hielo marino, la primavera se adelantó en Estados Unidos, y las sequías se extienden en todo el mundo.

Colombia, no es la excepción, nos hemos llenado la boca hablando de nuestra megadiversidad, sin embargo pocos son los que realmente defienden estas riquezas naturales desde los diferentes ámbitos en los que se requieren voces fuertes y contundentes para llevar al país a ser una verdadera potencia natural con un desarrollo sostenible.
Los frailejones, plantas que solo crecen en los páramos, están enfermándose por cuenta del calentamiento global, según informó el Instituto de Investigaciones Von Humboldt; además el Casanare con casi dos meses sin llover – y no se sabe si una mano humana delincuencial – arde en llamas, perdiendo así extensos territorios de bosque y miles de animales que mueren calcinados.

Mientras tanto, en las ciudades erigidas en cemento, donde la prioridad es el carro y los intereses privados, se pueden sentir claramente las islas de calor. En Medellín, por ejemplo, el centro es invivible – por lo menos ya están sembrando árboles en la Avenida Oriental – y peor, ya ni las montañas las podemos ver por cuenta del material particulado suspendido en el aire.

Todo esto, afecta también a los animales, hoy el planeta vive su sexta extinción masiva de especies y no por causas naturales, sino por el accionar humano, es la era del Antropoceno, como ya la han denominado los científicos. Nada de qué orgullecerse…

¿Y qué podemos hacer con este panorama que más que negro es gris?

Tomar decisiones inteligentes, defender nuestro mañana y a nuestra casa común.

Además de cambiar hábitos de consumo por unos más amigables con el ambiente, también es necesario conocer a quiénes nos representan en los entes gubernamentales y votar por aquellos que no solo defienden los intereses humanos, sino que tienen una visión amplia de nuestra existencia y de la importancia de proteger a los animales, el agua, los bosques, los páramos y todo lo que compone esta Tierra.

En Antioquia contamos con voces importantes, como la del Representante a la Cámara Nicolás Albeiro Echeverry, quien desde la política en el Congreso de la República ha podido liderar proyectos que conllevan a promover los derechos de la naturaleza, o como Alvaro Múnera que ha sido el concejal de los animales y logró sacar adelante un proyecto de acuerdo que promueve un menú verde y sustentable, decenas de fundaciones y ONGs que muchas veces de forma más silenciosa trabajan llevando un mensaje de paz con el ambiente a instituciones educativas, parques e incluso que generan debates tan importantes, como el llamado a nuestros gobernantes por una mejor calidad del aire, mediante la entrega de cajetillas de “cigarrillos” con mensajes a favor de un ambiente sano, derecho de todo ciudadano.

Agradezco a todas esas voces que se levantan y que cada día son más fuertes, ojalá no sea muy tarde para actuar, pero por lo menos que cada ciudadano con la capacidad de tomar decisiones, pueda hacerlo de forma inteligente no solo pensando en el bienestar de hoy, sino en el legado ambiental que le dejará a sus hijos y nietos.

@habitanteanimal

Ingeniera ambiental y defensora de los derechos de los animales
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Redacción Minuto30

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