Como positivo calificó el secretario Seccional de Salud y Protección Social de Antioquia, Carlos Mario Montoya Serna, las cifras de personas quemadas con pólvora a diciembre 28 de 2018.

Destacó que con respecto a la misma fecha del año anterior la disminución es del 31%, con un total de 38 quemados, de estos 15 son menores y 6 de estos menores que sufrieron amputaciones.

El año anterior a la fecha, los quemados eran 55, de los cuales 20 eran menores de edad. Dijo que esta disminución es significativa pero de ninguna manera nos deja contentos.

Agregó el funcionario que le preocupan mucho dos temas:

Que todavía los adultos y los padres crean que hay pólvora inofensiva y muchos de estos niños se han quemado con las chispitas que les dieron sus padres.

Lo segundo es que nos preocupa mucho la región del oriente antioqueño, porque del total de 21 municipios que han reportado quemados en Antioquia, ocho son de esa región.

Recordó también que los padres o adultos siguen teniendo sanciones por estos hechos que van desde la educación y el trabajo social, hasta penas privativas de la libertad y lo relacionado con la patria potestad de los menores.

Precisó que del Valle de Aburrá es preocupante la zona rural de Medellín, donde se han presentado 10 casos, y destacó el comportamiento positivo de los municipios del norte del Valle de Aburrá, como Bello, con disminuciones sustanciales en quemados, al igual que Copacabana y Barbosa.

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