¿Cómo lo afectan las reservas internacionales a usted como empresario?

Los desequilibrios en las cuentas comerciales y financieras internacionales generados por la crisis financiera del año 2008, han fomentado que los países en desarrollo estén adoptando, entre otras medidas, el aumento de sus respectivas reservas internacionales e intervenciones administrativas de tipo de cambio, que en lugar de disminuir la diferencia entre países desarrollados y en vía de desarrollo, por el contrario, han contribuido al aumento de la brecha entre estos dos grupos.

En términos prácticos, las reservas internacionales se podrían entender como la tenencia por parte de un País de activos en monedas de alta convertibilidad en el mercado internacional – divisas – como el dólar por ejemplo, con la finalidad, entre otras, de servir al País que las posee como puente de entrada al mercado internacional, cubriendo las compras que se realizan en el exterior.

Para el grupo de países en vías de desarrollo, entre los cuales se ubica Colombia, las reservas internacionales además de cubrir el pago de las compras realizadas en el exterior desde Colombia, cumplen la función de cubrir los déficits comerciales Nacionales, es decir, reponer las divisas cuando se presentan mayores importaciones que exportaciones en las transacciones comerciales realizadas.

Ahora bien, si las reservas internacionales no son en moneda propia, ¿cómo éstas pueden obtenerse?, debe señalarse que la respuesta se encuentra en el mismo mercado internacional, es decir, las exportaciones, la inversión extranjera y los préstamos realizados por entidades internacionales, representan las figuras más utilizadas por los gobiernos para incrementar o mantener sus reservas internacionales.

A manera de ejemplo, se puede señalar que las ventas de productos nacionales al exterior, como el caso de la venta del petróleo extraído en nuestro país a los Estados Unidos, representa una de las principales fuentes de divisas para Colombia, y podría decirse que sucede en condiciones similares en países como México y Venezuela.

En otros países latinoamericanos, como El Salvador, los giros internacionales que reciben las familias son una fuente importante de divisas, siendo así otra de las formas de acumulación de dólares por parte del gobierno. Otra buena fuente de reservas internacionales es la recepción de inversión extranjera en el País, como lo es, entre otras, la compra de acciones de empresas Colombianas por parte de inversionistas extranjeros, resultando fundamental para un gobierno dirigir un gran número de sus políticas publicas al fomento y atracción de dichas inversiones, puesto que éstas se traducen en nuevos recursos para la economía local.

El desequilibrio en la acumulación de las reservas internacionales puede, en determinado momento, ser perjudicial para la economía de un País, debido a que si éste cuenta con un bajo nivel de reservas internacionales, puede verse en dificultades para el cumplimiento de sus compromisos en el mercado internacional, como por ejemplo, en el pago de intereses de los préstamos adquiridos en entidades internacionales o en el cubrimiento del déficit comercial.

Si por el contrario, el País cuenta con un excedente de reservas, la economía puede llegar a sufrir la denominada enfermedad Holandesa, la cual consiste en la revaluación de la moneda local como consecuencia del exceso de oferta de divisas en el país, ocasionando consecuentemente la pérdida de competitividad de las empresas nacionales.

Ahora bien, ¿Cómo puede saber si hay mucha o poca reserva internacional en un país?, es necesario aclarar que la cantidad de divisas necesarias para el normal desempeño de la economía de un país, depende de manera directa del tamaño de la misma.

Existen mediciones empíricas que llevan a determinar cuál debe ser el margen de divisas con que debe contar un país para que no se presente ni déficit ni exceso en las reservas internacionales obtenidas. Una de las más usadas por los especialistas es la medición de los “meses de importaciones”, consistente en la relación que hay entre el total de reservas internacionales y la cantidad de importaciones de una economía (RI*12/M); de esta manera, si el país cuenta con meses de importaciones bajos, probablemente la moneda nacional tenderá a una fuerte devaluación, debido a la escasez de divisas en el mercado, pero si por el contrario, en el indicador se presenta un alto número de meses de importaciones, pueden exteriorizarse algunos brotes de la ya mencionada enfermedad Holandesa.

En cuanto al tema de las reservas internacionales, es preciso mencionar que se forman diversos debates en los países con relación a su uso. Algunas corrientes un tanto populistas, promueven que las mismas sean utilizadas en inversiones de infraestructura y en el desarrollo de programas sociales; pero en la práctica las reservas internacionales no pueden calificarse como un ahorro nacional.

De esta manera, el manejo de las divisas por parte del Gobierno de un país es fundamental para la economía nacional en general, y para la actividad productora en particular. Los empresarios y emprendedores nacionales podrían verse afectados en el desarrollo de sus actividades si se presentara tanto un déficit en las reservas, como un superávit que se traduzca en la revaluación de la moneda local.

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Especialista en Derecho Empresarial
Magister en Economía Aplicada