De nuevo está en peligro el cese de fuego unilateral pactado entre las disidencias de las FARC y el Gobierno Nacional. Luego de que un soldado en Putumayo, presuntamente miembro del frente Carolina Ramírez, asesinara a tres militares.
Alexander Orozco, que llevaba siete meses prestando servicio militar en el batallón de selva de Puerto Leguízamo, mató al capitán Juan Herrera, el sargento segundo Carlos Rojas y al soldado regular Yoandris Mejía. Luego él fue abatido mientras lo perseguían miembros del ejército en el río Caquetá.
Según las declaraciones del ejército, Orozco hacía parte del frente Carolina Ramírez de las disidencias de las FARC y estarían involucrados otros tres soldados, quienes estarían pensando en ejecutar atentados similares.
Estas acciones violarían cualquier respeto y podrían en peligro el cese de fuego unilateral pactado desde inicios de este año. La próxima reunión de las mesas de diálogos serían la próxima semana en San José del Guaviare.
Cabe aclarar que el frente Carolina Ramírez ya había provocado una suspensión del cese al fuego cuando masacraron a cuatro indígenas que habían sido reclutados y desertaron, en Solano, Caquetá.