Asegurado alcalde local de La Candelaria en Bogotá, por contratación que puso en peligro la salud de niños

La Juez 23 Penal Municipal de Bogotá, con función de control de garantías, cobijó con medida de aseguramiento de detención domiciliaria al alcalde de la localidad de La Candelaria, en la capital del país, Edilberto Guerrero Ramos, investigado por presuntas irregularidades en el ejercicio de su función pública.

Foto: Archivo

La juez en su decisión consideró que el imputado incurrió en graves irregularidades, las cuales van en contra de la recta administración pública.

Indicó la juez que con su actuación el alcalde de La Candelaria atentó contra la salud de cientos de niños de esa localidad, al no cumplir con los requisitos exigidos para entregar alimentos a cada jardín infantil, tal como lo señalaba el contrato adjudicado.

Por su parte el fiscal de la Unidad de Administración y Fe Publica narró que el alcalde incurrió en irregularidades cuando en el mes de noviembre del 2012 dio aprobación a un contrato por la suma de 78 millones 100 mil pesos, en el cual el contratista se comprometía a adelantar una campaña de seguridad alimentaria de por lo menos 17 jardines infantiles de la localidad.

Aseguró el fiscal que dentro de la investigación se estableció que la entidad seleccionada, no contaba con una sede, ya que la dirección que se colocó en la postulación, resultó falsa, al igual que la acreditación profesional, pues se constató que en ningún momento el beneficiado con el contrato había cursado esos estudios en una Universidad del Valle del Cauca.

Pese a las distintas visitas adelantadas por funcionarias de los entes de control sanitario, el alcalde Guerrero Ramos siempre hizo caso omiso a los llamados de atención sobre la idoneidad de la empresa seleccionada.

Ante la ausencia total de elementos para cumplir con el contrato a favor de la niñez de la localidad de La Candelaria, la Fiscalía indicó que el imputado violó todas las normas establecidas para lograr una contratación transparente y justa.

Al no tener en cuenta la recta administración pública, el fiscal del caso le imputó al procesado los delitos de concierto para delinquir, prevaricato por acción, contrato sin el cumplimiento de requisitos legales e interés indebido en la celebración de contratos; delitos que no aceptó.

Guerrero Ramos ostenta el cargo en esa zona del sur de Bogotá, luego de tomar posesión el 4 de abril del 2012.

Al final de la audiencia, el alcalde Guerrero Ramos fue llevado a la cárcel la Modelo, desde donde se le trasladará a su lugar de residencia.