Anuncio de inyecciones diarias redujo la volatilidad del dólar en Brasil

Tras haber acumulado una apreciación del 20 % este año y de haber cotizado el miércoles a 2,451 reales para la venta, su mayor valor desde el 9 de diciembre de 2008, el dólar había caído a 2,370 reales a media jornada de este viernes, con una bajada del 2,59 % con respecto a la víspera.

La depreciación de la moneda estadounidense se produjo un día después de que el Banco Central anunciara un millonario plan para intervenir en el mercado de divisas diariamente con el fin de detener la volatilidad y frenar la fuerte valorización del dólar.

El plan prevé la venta diaria entre lunes y jueves de hasta 500 millones de dólares en el mercado futuro y de una inyección de hasta 1.000 millones de dólares los viernes en subastas de la moneda estadounidense con el compromiso de recompra.

La estrategia del organismo emisor para ofrecer protección al riesgo de empresas con elevado endeudamiento en moneda extranjera y para aumentar la liquidez en el mercado cambiario puede tener un costo de 54.500 millones de dólares hasta finales de diciembre, según el Banco Central.

El anuncio del plan y la primera subasta de dólares hecha este viernes ayudaron a reducir las fuertes oscilaciones, afirmó hoy el jefe del Departamento Económico del Banco Central, Tulio Maciel.

«El anuncio previo contribuyó para que los agentes tengan un horizonte de planificación y para reducir la volatilidad del cambio», afirmó el funcionario en declaraciones a periodistas.

Según economistas, la fuerte subida del dólar en Brasil es provocada por la expectativa de los inversores de que la Reserva Federal de Estados Unidos suspenda en breve su programa de estímulos monetarios.

Ello debido a que, cuando la mayor economía del mundo comienza a elevar las tasas de intereses y a reducir sus inyecciones de recursos, los capitales que actualmente buscan altos rendimientos en otros países tenderán a dirigirse a Estados Unidos.

El déficit récord acumulado por Brasil en sus transacciones con el exterior, así como el saldo negativo en la balanza comercial, también han provocado una fuga de dólares del mercado brasileño.

La significativa apreciación del dólar en lo que va del año ha encendido una alerta en el Gobierno y en los inversores por su posible impacto en la tasa de inflación y en los tipos de interés, así como en la deuda que mantienen las empresas del país en la divisa estadounidense.

De acuerdo a cálculos del mercado financiero, desde enero pasado el Banco Central ha inyectado cerca de 40.000 millones de dólares en su empeño por evitar una mayor depreciación del real.

El emisor brasileño no realizaba intervenciones diarias en el mercado cambiario desde 2002, cuando el temor de los inversores a una victoria electoral del entonces temido Luiz Inácio Lula da Silva disparó la tasa de cambio hasta el récord de casi 4 reales por dólar.