Al pan, pan y al vino, vino

Independientemente del resultado que deja a Iván Duque y Gustavo Petro como los candidatos a disputarse la Presidencia de la República, El gran ganador de estos comicios electorales fue la Registraduría Nacional del Estado Civil; entidad sobre la que se tendió un manto de dudas meses atrás, acerca de la legalidad y legitimidad de los posibles resultados, se hablaba de manipulación de software, retención de datos, demora en la entrega de resultados y contrario a todo ello, fueron unas elecciones transparentes, vigiladas y con garantías para todos los candidatos y de resultados express.

Históricamente el país ha sostenido unos niveles de abstención muy altos, bien sea por un comportamiento apolítico de la sociedad, o por simple reclamo de la gente a una clase política que no ha sido capaz de interpretar las necesidades de los ciudadanos de a pie, que reclaman oportunidades y transparencia, da tranquilidad ver unas elecciones donde la mitad más tres de votantes decididamente concurrieron a las urnas, cosa que no sucedía desde el fin del frente nacional, deja ver que el abanico de candidatos logró despertar el interés colectivo de los colombianos.

Todos los pronósticos apuntaban a una votación cercana a los 18 millones, pronósticos que se cayeron al obtener un resultado mucho más abultado cercano a los 20 millones de colombianos que se manifestaron; representando un 53% del censo electoral; este fenómeno se da desde mi apreciación, porque no estábamos enfrentados a una sombra reeleccionista en donde los niveles de votación siempre fueron más bajos, que los de las contiendas en donde no habían candidatos en el poder.

Así mismo es claro que Colombia no es un país de medias tintas, en esta elección queda claro que las posiciones radicales y coherentes desde el principio son siempre, mejor vistas que las que se tornan gaseosas contradictorias o difusas; mejor dicho con los colombianos en materia electoral se aplica perfectamente el proverbio popular que nosotros somos gente “al pan, pan y al vino, vino”

En el escenario de hoy las matemáticas indicarían que los candidatos tendientes a la izquierda que son Gustavo Petro, Sergio Fajardo y Humberto de la Calle sumados alcanzaron una votación de 9.840.130 votos por 9.094.605 de Iván Duque, German Vargas Lleras, Jorge Trujillo y Viviane Morales que habiendo renunciado saco votos; ¿será entonces qué Colombia se volvió un país de izquierda?, como las matemáticas no funcionan para medir comportamiento del elector; empieza una nueva campaña donde las alianzas y estrategias deberán focalizarse en cautivar esos 6.5 millones de colombianos que no respaldaron ni a Duque ni a Petro; el primer round lo ganó Duque, pero es ahora que empieza una carrera contrarreloj que definirá el rumbo del país ¿todo a babor o todo a estribor? ustedes que creen…

@MarioFX_