La Máquina de los Sueños

La apnea del sueño es uno de los trastornos que se presenta a la hora de dormir. Para tratarlo está el CPAP, una máquina que acompaña los sueños de quienes tienen esta condición. Juan

Diego tiene 4 años y es el testimonio de la recuperación.

A pesar de que la apnea del sueño (uno de los trastornos que se presenta en el dormir) suele ser más común en hombres adultos entre los 40 y 60 años, Juan Diego, a sus 4 años de edad, fue diagnosticado como paciente candidato a utilizar el CPAP, máquina especializada en tratar este tipo de condición. Con la mente tranquila y llevando paso a paso las recomendaciones del especialista, Sonia Íngrid Manchego Rondón, madre de Juan, asegura que “a un paciente con este trastorno no hay que hacerlo sentir como enfermo. Afortunadamente existe un tratamiento y si es diagnosticado a tiempo, es superable”.

Según Franklin Escobar Córdoba, director científico de la Fundación Sueño Vigilia Colombiana y profesor asociado de psiquiatría de la Universidad Nacional de Colombia, “la apnea del sueño es un trastorno caracterizado por la presencia de ronquido, pausas o paradas respiratorias nocturnas y somnolencia diurna excesiva. Se detecta mediante el examen médico y se confirma con un estudio de sueño llamado polisomnografia (examen que toma un registro de ciertas funciones orgánicas en la medida en que la persona duerme o intenta dormir)”.

Otros síntomas que se encuentran son alteraciones de memoria, de atención, depresión, insomnio, disfunción eréctil, despertares con sensación de ahogo, idas continuas al baño en la noche, resequedad en boca y garganta al despertar, cansancio durante el día y dolor de cabeza en las mañanas al levantarse.

Antes de ser diagnosticado, Juan Diego roncaba al dormir, permanecía con la boca abierta y se sobresaltaba en la noche como si estuviera asustado. Esas fueron las señales de alerta que su madre tuvo en cuenta para acudir al especialista. “La pediatra del niño autorizó la primera polisomnografía. Luego de obtener los resultados fue remitido al otorrinolaringólogo quien solicitó una nueva pero con CPAP. Finalmente se determinó que era necesario el uso del equipo durante la noche”, comenta la madre del niño.

El doctor Escobar asegura que “la apnea del sueño se produce generalmente por una obstrucción mecánica o fisiológica de la vía aérea superior; el equipo CPAP mejora la obstrucción y logra que la persona oxigene mejor sus tejidos y que desaparezcan la mayoría de los síntomas de este síndrome”. En general, el tratamiento puede durar varios años. Hay ocasiones en las que podría ser permanente o indefinido, y solo en pocos casos se utiliza por cortos periodos de tiempo. Juan Diego estará en tratamiento aproximadamente hasta que cumpla 7 años (actualmente tiene 5 años), aunque durante el proceso tendrá una nueva prueba para conocer su progreso.

“Cuando supe que el niño tenía que utilizar el CPAP, asimilarlo no fue nada fácil. Juan utilizaba oxígeno y ya se había adaptado a él, entonces el nuevo tratamiento significaba comenzar desde cero. Durante los primeros días lloraba y me pedía que solo le colocara el oxígeno. Le pregunté al doctor y me dijo que no había necesidad de utilizarlo, bastaba solamente con la máquina.

Así que al no ver el oxígeno, no le quedaba más remedio que usar el aparato”, recuerda Sonia. El CPAP ofrece calidad de vida al paciente a nivel neurológico y físico en aspectos relacionados con la maduración cerebral y el crecimiento. Una de las recomendaciones más importantes en el uso de la máquina es el aseo diario. Así mismo, la disposición del entorno al recibirlo pues ha de estar durante cada noche en la habitación.

Una noche con la máquina del CPAP

“Juan Diego se cepilla los dientes, se lava muy bien la carita y se pone la pijama. Alistamos el tanque de agua a la medida, lo conectamos a la corriente mientras le voy colocando la careta y vamos rezando la oración que le encanta. Damos gracias por el día de que pasó y en ese momento le digo que ya lo voy a encender, que tiene que respirar y no volver a abrir la boquita para que no se sienta ahogado.

Luego le recuerdo que cada vez que se coloca el CPAP va a crecer más y a ser más inteligente. Se acuesta, le pido que cierre los ojitos para poder darle el besito y leerle el cuento. Le digo cuánto lo amo y hasta el otro día o las horas que tolere el equipo (puede ser de 2 – 4 o las 8 horas).

En la mañana, al retirar las mangueras y la careta le realizo el aseo diario para poderlo usar de nuevo. Durante la noche debo estar pendiente de que no se enrede en la manguera. Y así todos los días. Aunque fue muy dura la adaptación, poco apoco se ha ido acostumbrando. Hay que motivarlo mucho y decirle que si es juicioso pronto no tendrá que utilizarlo más. Ya no ronca, no se sobresalta en las noches, duerme más tranquilo. El siguiente paso es verificar que superó la apnea del sueño y que el tratamiento fue un éxito. Así podrá seguir su vida normal sin aparatos”, comenta la señora Manchego.

Acerca del CPAP

De acuerdo con el doctor Escobar, “existen diferentes tipos de máquinas de CPAP (CPAP,BiPAP, Auto CPAP, Auto BiPAP, servoventilador) y es el médico especialista quien debe indicar cuál es el aparato adecuado según la condición clínica de cada paciente. Cada uno tiene sus contraindicaciones y riesgos como cualquier dispositivo médico.

En general, los efectos adversos se toleran y si el paciente tiene un buen acompañamiento y atención médica especializada, la aceptación del tratamiento con CPAP y la adherencia a largo plazo serán buenas”. Si el paciente deja de usar la máquina los síntomas de la apnea del sueño regresan en poco tiempo.

El especialista comenta además que el aparato previene complicaciones de la apnea del sueño como las enfermedades cardiopulmonares y cerebrales que se pueden presentar si no se trata a enfermedad. A largo plazo, la persona se siente mejor, sin cansancio, su vida durante el día es adecuada, con buena capacidad para concentrarse debido a que tiene una buena calidad de sueño, deja de roncar, el cansancio diurno también tiende a desaparecer la mayoría de las veces, entre otros beneficios. Aunque la máquina maneja el mismo principio para cualquier edad, tiene especificaciones según el estado clínico de cada paciente.

Algunas recomendaciones para manejar correctamente el CPAP (Tomado de la Fundación Sueño Vigilia Colombiana)

> El equipo de CPAP debe colocarse en una superficie plana y firme, cerca al lado de la cama (mesa de noche).

> Se debe agregar el agua en la noche y en el día retirar el agua sobrante, el equipo no debe tener agua durante el día.

> Antes de prender el equipo siempre se debe utilizar las hebillas o ajustadores que tiene la máscara para ponerla, quitarla y evitar que se vaya desgastando y pierda su función de ajuste.

> Hay que lavar semanalmente la máscara, la manguera corrugada, el vaso del humidificador y dejar que se seque al aire ambiente. Se debe limpiar todos los días con un paño húmedo la máscara para que esté limpia cada vez que se vaya a usar.

> Una buena adaptación y un excelente tratamiento depende principalmente de la constancia y entre más tiempo dure con el equipo en las noches, más rápido vamos a ver unos buenos resultados y una mejor calidad de vida.

Fuente: Revista MedPlus
ED 90
Síganos en Facebook