El delantero argentino Leo Messi ha validado su papel como embajador de la Unicef haciendo una reflexión sobre el conflicto sirio y lo que millones de niños deben padecer como resultado del cruel enfrentamiento que se libra en ese territorio.
Messi afirmó tener el «corazón destrozado» por lo que hace seis años viven millones de menores de edad y lo hizo a través de sus redes sociales.