Clima hostil en el fútbol de Dinamarca. Este lunes se disputó el clásico entre el Brondby y el Copenhague, y la hinchada local ofendió con todo a la visita.
Los fanáticos del cuadro de las afueras de la ciudad, lanzaron ratas muertas a los jugadores de los Leones.
Sin embargo, las agresiones no fueron suficientes para influir en el marcador, puesto que el Copenhague se quedó con la victoria por 0-1, y de paso, con el liderato absoluto, con 13 puntos más que su rival de turno.
Los roedores cayeron al campo de juego cuando un futbolista se acercó al costado para un tiro de esquina. ¡Fuerte!