Las máximas autoridades estadounidenses, al frente de las tareas derivadas del derrame, confirmaron el cierre definitivo de la fuente del petróleo, que provocó el mayor desastre ambiental de la historia de los Estados Unidos.
La catástrofe desatada el pasado 20 de abril, ha terminado finalmente. Luego de la explosión en la plataforma Deepwater Horizon, en la que murieron 11 trabajadores, una mancha de petróleo se extendió por las aguas, afectando el ecosistema marino y costero del sur estadounidense.
El pasado viernes se introdujo a 4 kilómetros bajo tierra un sellado de cemento, que pudo endurecerse el sábado. Durante el transcurso del domingo se llevaron a cabo las pruebas que dictaminaron el éxito de las medidas.
Vía América.Infobae.com