La Gobernadora del Meta, Rafaela Cortés, ha manifestado su firme oposición ante la decisión de formalizar el colegio denominado Internado Agropecuario y Ambiental ‘Gentil Duarte’, nombre que hace alusión a un comandante de las FARC disidentes.
Este colegio será renombrado como agroecológica Sabana del Yarí y estará bajo la jurisdicción del Ministerio de Educación, con la finalidad de impulsar transformaciones territoriales en el contexto del proceso de paz entre el Gobierno colombiano y el Estado Mayor Central de las FARC.
La gobernadora Cortés ha expresado su rechazo categórico a recibir esta institución educativa, argumentando que fue construida con recursos provenientes de actividades ilícitas como secuestro, extorsión y narcotráfico.
“Un colegio construido por las disidencias del Estado Mayor Central de las FARC, con dineros ilícitos de secuestros, de extorsión y de narcotráfico”, enfatizó Cortés.
La gobernadora lamenta que la decisión de entregar el colegio a la Gobernación del Meta haya sido tomada sin tener en cuenta su opinión ni la del gobernador del Caquetá.
En este sentido, ha dejado claro que no aceptará recibir un colegio bajo estas condiciones.
Según las declaraciones de Cortés, el colegio fue erigido en los límites entre Meta y Caquetá, lo que genera una incertidumbre territorial que debe ser resuelta antes de cualquier inversión adicional.
Además, señala la importancia de no permitir que las disidencias de las FARC continúen ejerciendo influencia en el territorio y disponiendo de recursos ilícitos para sus actividades.
La postura de la Gobernadora del Meta representa una oposición clara y contundente ante la legitimación de instituciones construidas con fondos provenientes de actividades criminales.
Su firmeza en este tema evidencia la necesidad de mantener la integridad y transparencia en las inversiones educativas y territoriales del país.
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