Aeropuerto El Dorado. Foto tomada de su página web.
Bombas, carros en caravana, carteles y a veces hasta papayera había en los aeropuertos antes de que la emergencia sanitaria por el COVID-19 impidiera que familiares y amigos de quienes iban a viajar ingresaran a las instalaciones de las terminales aéreas o sus alrededores.
La pandemia obligó a que ese tradicional “paseo de olla” para ir a acompañar al viajero se imposibilitara, pues en su reemplazo llegaron las medidas del tapabocas, el distanciamiento social y la despedida representada en una mano que se agitaba desde lejos, a través de los vidrios.
Una mano que antes eran muchas y fueron disminuyendo por las restricciones, al punto que algunos comenzaron a dejar de asistir a ese ritual de darle el adiós o hasta luego al que se iba.
No obstante, a un poco más de un mes de que se levantara la emergencia sanitaria, ahora podrán volver esas despedidas al Aeropuerto El Dorado, pues se anunció que a partir del 10 de agosto las restricciones impuestas por el COVID-19 se levantarán.
El concesionario que maneja el Aeropuerto El Dorado, la Opain, indicó que nuevamente podrán ingresar acompañantes de los viajeros a las instalaciones de la terminal aérea, sin necesidad de mostrar algún tiquete.
También volverán los adioses y demostraciones de afecto con besos ya que no será obligatorio el uso del tapabocas ni en El Dorado ni en los aviones, donde además se volverán a ofrecer alimentos a los pasajeros.
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