Ni bien terminó de caer por un impresionante nocaut, cuando este hombre fue sorprendido por su propia madre, quien le propinó una senda cachetada por la derrota.
El encuentro- pactado a dos rounds- dejó como perdedor a Vicktor Kichigin, quien padeció también con el enojo de su madre, quien nunca dejó de darle indicaciones desde afuera del ring.
La señora, Anna Azovskaya, se metió dentro del ring y mientras limpiaba la sangre del rostro de su hijo, lo abofeteó y lo obligó a levantarse.
El joven de 22 años abandonó el escenario sin esperar la resolución del juez.
«A muchos atletas les gustaría tener a sus seres queridos cerca de ellos en momentos difíciles, pero no es una posibilidad para muchos», explicó la madre del peleador y agregó: «Creo que mis hijos tienen suerte porque siempre estoy ahí para apoyarlos y ayudarlos».