Después de más de tres meses sin registrar un deceso por COVID-19, Nueva Zelanda confirmó que falleció un hombre en Auckland.
El país registró cinco casos nuevos; por ahora las restricciones sanitarias permanecerán iguales.
La primera ministra Jacinda Ardern anuncia que la configuración de restricciones seguirá siendo la misma por ahora, y su contraparte australiana insinúa una burbuja de viajes.