Un insólito hecho ocurrió recientemente en Escocia cuando enfermeras fueron hasta la casa de una mujer a aplicarle la vacuna contra el Covid-19 y se dieron cuenta que la mujer no se encontraba en el lugar, y peor aún, llevaba más de 10 años muerta.
Y es que de acuerdo a medios locales, la mujer que registraba con 80 años e identificada como Christina Malley fue citada para aplicarse la vacuna, pero como no asistió, las profesionales de la salud decidieron desplazarse hasta su casa; sin embargo, cuando llegaron ella no se encontraba y su esposo les dijo que hace varios años se había ido a vivir al extranjero.
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Las enfermeras no quedaron muy convencidas de lo que les dijo el hombre, por lo que dieron aviso a la Policía para que se encargaran de investigar, y efectivamente cuando llegaron al lugar e hicieron las pesquisas necesarias, hallaron los restos de la mujer en poder de su esposo, dicen medios locales.
Ante este macabro hallazgo, los forenses del caso pudieron determinar que la mujer llevaba al menos 12 años de muerta. Las autoridades abrieron una investigación para esclarecer las causas de muerte de la mujer y descartar un homicidio, informaron medios locales.
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