Un insólito hecho ocurrió luego de que el Invicta Sauro le ganara por una tremenda goleada de 27-0 al Marina Calcio, en la división juvenil de Italia, cuando el presidente del club ganador, Paolo Brogelli, despidió al entrenador Massimiliano Riccini por “faltarle al respeto al adversario”.
Tras anunciar la decisión el directivo argumentó que “nos quedamos atónitos por el resultado del partido, el adversario siempre debe ser respetado y hoy esto no ha ocurrido”.
Incluso Brogelli se disculpó con el equipo rival por el abultado marcador: “como presidente me disculpo sinceramente. Nuestros técnicos deben tener la tarea de capacitar, y sobre todo, de educar a los niños. Lo que ocurrió es la antítesis de los supuestos valores del fútbol juvenil».
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