Polémica ha causado una revelación de la prensa de Oregón, en Estados Unidos, que confirma que restos de fetos humanos abortados, así como miembros amputados y otras clases de tejidos humanos, son usados para iluminar las casas en dicho estado.
El diario B.C. Catholic, con sede en Vancouver, identificó la planta como Covanta Marion, ubicada en Brooks, Oregon.
Se estima que la planta procesa unas 700 toneladas de desechos médicos procedentes del condado al año y unas mil 200 procedentes de otros sitios, se ha pedido que una comisión investigue el hecho.