En el hecho que fue capturado presuntamente por los compañeros del joven, se ve al menor sentado y amarrado con un cinturón a una silla del aula, mientras que el profesor le lanza humillantes frases de reproche: «Una persona que se para, que se mueve, que habla (…). A mí me dan ganas de matar y comerme el muerto. Y le he tenido mucha paciencia de consideración a su situación…» dice el profesor.
La denuncia ha tomado fuerza ya que el estudiante ha sido diagnosticado con Síndrome de Asperger, las personas con este diagnóstico pueden presentar un trastorno del comportamiento que afecta la capacidad de socializar y suelen tener una conducta social inusual, según explican medios manizaleños.
Los padres del menor hicieron el reclamo a la institución y a la entidad de educación local, quienes aseguran que estudiarán el caso, sin embargo, el joven fue retirado de las aulas por sus progenitores y el docente continúa en la institución.
Por otro lado, los internautas aseguran que dejando a un lado la condición del menor, la actitud y el castigo del docente no son adecuadas para ningún alumno.
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