Mediante un procedimiento aduanero en compañía de rentas departamentales, las autoridades del Valle de Aburrá detectaron al interior de un parqueadero en el sector del parque Botero de Medellín, dos bodegas las cuales estaban ahí para no levantar sospechas y evadir los controles.
Al interior de las bodegas, las autoridades hallaron 5.592 botellas de licor adulterado, que pretendían ser comercializadas a la ciudadanía durante esta temporada decembrina.
La mercancía se encontraba avaluada en 580 millones de pesos y estaba siendo custodiada por una persona de nacionalidad venezolana quien era la encargada de distribuir y comercializar este licor adulterado a algunas cantinas y discotecas ubicadas en este sector.
Estos licores adulterados en muchas ocasiones pueden contener metanol, gasolina y otros productos que son altamente perjudiciales para la salud, y causar efectos como dolores, nauseas, vómitos, problemas en el hígado y riñones, e incluso la muerte.