Este domingo las autoridades de China anunciaron que se impondrá la medida de confinamiento en el noroeste del país luego de que se registrara un aumento de casos y la muerte de dos personas luego de más de un año.
En Jilin, sus habitantes no podrán salir de sus casas durante tres días, medida que iniciará desde la medianoche del lunes.
La ciudad de Changchun, que ya estaba confinada desde el 11 de marzo, endurecerá la medida por tres días, tiempo en el que solo podrán salir el personal de salud y relacionados con el control de la pandemia.
En cuanto a Shenzhen, desde el pasado domingo sus 17,5 millones de habitantes están confinados, pero ahora volverá a operar el transporte público y parte de la actividad economía.
De acuerdo con los reportes, la variante ómicron parece ser la causante del aumento de los contagios en China.
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