El hospital San Vicente de Paul vive una compleja crisis debido a que, por la falta de pacientes que han tenido, sus ingresos han caído notoriamente, a tal punto de tener que desistir de 20 médicos, algunos de ellos con importantes especializaciones y con más de 15 años en el hospital.
Según se pudo conocer, entre los afectados hay cirujanos vasculares, endocrinólogos, reumatólogos, médicos generales de piso, enfermeras especializadas y médicos internistas.
Sobre esta situación, el presidente del San Vicente Fundación, Mauricio Tamayo, indicó que esto se debe a que la ocupación de los servicios médicos apenas alcanzó el 30% en abril, y por ello tuvieron pérdidas superiores a los $6.000 millones.
“Así como hemos solicitado unas medidas externas al hospital y a San Vicente Fundación, también hemos tomado unas medidas internas. Y, esas medidas tienen que ver con el ajuste de tiempos con base en la demanda de los servicios de la comunidad y que hemos concertado con todo nuestro equipo humano”, expresó.