Testigo clave en caso del crimen de porrista de Millonarios tiene una discapacidad cognitiva: Medicina Legal

Luisa Fernanda Ovalle Chávez. Archivo

Minuto30.com-. El 25 de abril próximo se reanuda el juicio en contra de Hugo Alejandro Zabaleta Sossa por su presunta responsabilidad en el homicidio de la joven porrista Luisa Fernanda Ovalle Chávez, en hechos ocurridos el 30 de noviembre de 2013 en la localidad de Kennedy, al sur de Bogotá.

Ese día Juan Gabriel Billabón Guarnizo dará su testimonio. El hombre es considerado como uno de los principales testigos dentro de la investigación por el crimen de la porrista de Millonarios.

Las declaraciones estaban programadas para este lunes, sin embargo fueron aplazadas porque el testigo no pudo viajar a Bogotá. «Se encuentra residenciado en la ciudad de Medellín y no fue posible lograr su comparecencia el día de hoy, al parecer se presentaron algunos inconvenientes con el vuelo reservado para horas de la mañana», dijo el fiscal del caso, reseñado por RCN Radio.

No obstante, en la audiencia de este lunes fue revelado un informe de Medicina Legal, en el que se asegura que el testigo presenta una discapacidad cognitiva leve, un trastorno del lenguaje y un nivel de abstracción más bajo que el promedio de la población.

Pese al dictamen, la médica psiquiatra que lo entrevistó aseguró que su discapacidad no interfiere con su capacidad para declarar en una investigación o un juicio, porque no presenta inconvenientes para recrear viviendas o experiencias.

Juan Gabriel Billabón Guarnizo había manifestado que la noche de los hechos él se encontraba con un grupo de amigos en un bar, cerca al parque Los Ángeles en el barrio Castilla. En ese momento fue al baño y al ver que estaba ocupado decidió ir a un canal de aguas lluvia.

Allí, según él, vio cuando Luisa Fernanda Ovalle era agredida por parte de un sujeto, que la apuñaló en dos oportunidades para robarle el bolso. Contó el testigo que después de lo que observó regresó al bar y vio cuando el señalado agresor ingresó al mismo establecimiento.

Sin embargo, para la defensa del procesado esta versión no tendría veracidad porque el testigo, al parecer, se encontraba bajo los efectos de bebidas embriagantes.