Lo diré con franqueza, Iván Duque Márquez estaba lejos de ser mi precandidato favorito, prefiero a Rafael Nieto Loaiza, pero las encuestas sucesivas lo dieron como ganador, hoy es el candidato del Centro Democrático que se enfrentará a Marta Lucia Ramírez y a Alejandro Ordoñez para definir quién será el candidato único de esa necesaria coalición, llamada a ganar en primera vuelta.

El mecanismo de selección no fue el mejor, las encuestas, lejos de dar certezas y lograr consensos, trajeron dudas y dieron lugar a la división, pero fue el mecanismo que escogió el Centro Democrático, representado en sus cinco precandidatos, ellos aceptaron los resultados con dignidad, seguir su ejemplo es lo mejor que las bases del partido podemos hacer, sin que importe a cuál de los precandidatos apoyamos.

Entiendo el inconformismo de muchos miembros del Partido y lo comparto, creo firmemente que se cometió un error cuando se impulsó ese mecanismo de elección, ni a mí, ni a ninguno de los militantes que tengo el gusto de conocer, nos llamaron las encuestadoras, tengo muchas dudas sobre Iván Duque, seguramente tengo diferencias ideológicas con el candidato escogido, admiro profundamente a Alejandro Ordoñez y a Marta Lucia Ramírez, y comparto con ellos mucho de su ideario conservador. Sin embargo, nada de lo anterior es suficiente para llevarme a renunciar a mi partido e irme a trabajar por otra candidatura. No tomaré el camino fácil, creo que los partidos políticos, en los que creo profundamente, se construyen desde adentro, y estoy seguro que el Centro Democrático es el último bastión de Colombia ante el socialismo y el Régimen, que Álvaro Gómez Hurtado no se cansaba de señalar.

Apoyaré la candidatura presidencial del Centro Democrático, a Iván Duque, trabajaré para que la bancada parlamentaria del Partido crezca, ya que será finalmente la bancada del próximo gobierno, sea cual sea finalmente el candidato de la Gran Alianza Republicana.

Mi ideología, sigue intacta, sigo creyendo en las mismas ideas que me permitieron sentirme representado con la aspiración de Rafael Nieto, y sigo creyendo que Nieto será presidente en 2022, pero eso solo será posible si corregimos ahora el rumbo del país y lo llevamos por el camino correcto, eso solo será posible si corregimos, durante estos cuatro años los problemas que hoy se hacen visibles dentro del uribismo.

Tengo dos invitaciones que hacer:

A la militancia la invito a que definamos que significa ser uribista para que un escenario de división como el que enfrentamos hoy no vuelva a ocurrir y que tengamos una carta de navegación clara, que nos permita saber siempre qué camino seguir.

A Iván Duque lo invito a esforzarse por construir un programa de gobierno con el que se sientan representados todos los militantes, así tenga que dejar a un lado algunas de sus 162 propuestas. Sueño con un programa único del uribismo, sin orgullos personales, sin personalismos, sin vanidades. Confió en que Iván Duque estará a la altura de ese desafío

Nota: Cuando un barco se acerca a la tormenta la tripulación no salta al mar, se mantiene dentro de la nave para mantenerla a flote y cambiar de rumbo.

@ngoyenechev

Author Signature
Redacción Minuto30

Lo que leas hoy en Minuto30... Mañana será noticia.

  • Compartir:
  • Comentarios

  • Anuncio