Por ‘impopular’ y ‘superpoblado’, Transmilenio se rajó en publicación de The Economist

La última edición de The Economist le dedicó algunas páginas al sistema Transmilenio, pero no precisamente para halagarlo, sino para enseñar que es un medio que enfrenta grandes problemas y mucha tensión.

En un artículo titulado ‘Los problemas del Transmilenio de Bogotá’, se planteó que dicho sistema era una alternativa hace dos décadas para reducir los trayectos en la capital del país, y con un precio 6 veces menor que el de la construcción de un metro.

Entre otros datos se destacó que el Transmilenio está moviendo cada hora a 15 mil personas, más de la capacidad que inicialmente se permitiría, por lo que los buses están llenos y los tiempos de espera han aumentado más de lo planeado.

Además se destacó que exalcaldes no aportaron al sistema como en el caso de Samuel Moreno, involucrado en hechos de corrupción, y Gustavo Petro, quien bajó las tarifas y ahondó el déficit fiscal del sistema de transporte.

Además, en la publicación se destacó que Enrique Peñalosa, exalcalde que acaba de entregar el puesto, fue considerado al entregar el Transmilenio como una ‘estrella entre los urbanistas’, pero 20 años después el sistema es considerado como ‘superpoblado e impopular’.