Por Ángela María Falla Munar*

Entre el servicio secreto y las “damas de compañía” en Cartagena desde hace un tiempo la prostitución y el turismo sexual esta en tela de juicio en Colombia. Dividida en dos polos la opinión pública defiende o culpabiliza a la puta que no se dejo enredar por el gringo que quería llevarla a la cama.

Por Ángela María Falla Munar*

Pero a la gente lo que le interesa de todo este gran escandalo es que han truncado profesionalmente a los agentes del servicio secreto, que Dania Londoño se ha vuelto una “celebridad”, que ahora no se puede visitar Cartagena con la familia por que la mitad de la población son prostitutas y que la canciller Ángela Holguín la embarró en sus declaraciones.

Este tema quedo en escandalo y en una fama de putas que tenemos las colombianas, y no piensen que solo son las cartageneras, aquí siempre ha existido la prostitución y el turismo sexual, esta etiqueta no la ganamos todas.

Hace una par de meses en Bogotá apareció el centro histórico completamente empapelado “Busco mujeres bonitas para damas de compañía sueldo entre $3.000.000 y $4.000.000 de pesos, clientes extranjeros”. Nadie dijo nada, un par de noticias, cantó un grillo y pasó la bolita de heno en el suelo polvoriento. Mujeres jóvenes venden su virginidad y se acuestan con “traquetos” para obtener un estilo de vida alto, poniéndose las téticas (que les gustan más a los hombres), etc., secretos a voces que no indignan a nadie.

En el mundo existe un problema grave sobre tráfico de personas. Mujeres son engañadas con el fin de trabajar en otros países convirtiéndose en esclavas sexuales, si leyó muy bien, la esclavitud todavía existe. Ya no es el afrodesendiente encadenado a un árbol y lacerado por látigos; son mujeres a las que les retienen sus documentos en un país donde no hablan su mismo idioma, que drogan en contra de sus voluntades y las vuelven adictas para así dominarlas, que violentan de todas las formas imaginables, alejadas de “su tierrita” se pierden en el mundo de la prostitución obligada.

Estos son los temas que deberían estar de boca en boca en Colombia, el tráfico de personas, la esclavitud sexual, la prostitución como negocio y no precisamente para las mujeres que la ejercen. Sigue siendo banal mi país que me duele cada vez que olvidamos lo que es realmente importante. @angelafallam

 

*Abogada Representante Legal del Colectivo de Mujeres Jóvenes.

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Redacción Minuto30

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