Coordinador del Sistema de Vigilancia Epidemiológica de cáncer infantil en Cali, Óscar Ramírez, quien habla durante una entrevista con Efe en Ciudad de México (Mèxico). EFE

Coordinador del Sistema de Vigilancia Epidemiológica de cáncer infantil en Cali, Óscar Ramírez, quien habla durante una entrevista con Efe en Ciudad de México (Mèxico). EFE

Cali, ciudad colombiana elegida como parte de la iniciativa C/Can 2025 (Desafío de Ciudades contra el Cáncer) de la Unión Internacional Contra el Cáncer (Uicc), presenta un 52 % de sobrevida en niños con cáncer a cinco años.

Así lo explicó en entrevista con Efe el doctor Óscar Ramírez, coordinador del Sistema de Vigilancia Epidemiológica de cáncer infantil en Cali, presente en la Cumbre Mundial de Líderes en Cáncer que se llevó a cabo esta semana en la Ciudad de México.

«La sobrevida de los niños con cáncer está en 52 % a cinco años, comparado con los países europeos y Estados Unidos que está en el 80 % y esa brecha es una pérdida en la efectividad de los tratamientos», señala.

Las cifras de Cali son positivas y veraces debido a que existe un seguimiento detallado de cada paciente, apunta el también director de trasplante de médula ósea pediátrico del Centro Médico Imbanaco y uno de los artífices del registro poblacional de cáncer de la ciudad colombiana.

«Tenemos un sistema único de monitoreo continuo de los resultados clínicos de todos los niños que han sido tratados en la ciudad. Es un proyecto que surgió en 2009 como parte del registro poblacional», afirma.

Gracias a la incorporación de la urbe colombiana a la iniciativa C/Can 2025 y después de que 186 expertos hicieran un diagnóstico, el gran desafío de Cali es eliminar la alta fragmentación presente en el sistema de salud que obliga a los asegurados a cambiar de centro con frecuencia.

«Es muy importante que el sistema de salud esté organizado para que permita a ese paciente no perder el tratamiento con sus ciclos de quimioterapia y sin atrasarse», argumenta el oncólogo.

Otro problema es la falta de profesionales y de camas para atender a pacientes con cáncer que provienen de Cali, pero también de otras zonas del departamento del Valle del Cauca, cuya población asciende a 4,6 millones de habitantes.

«El 50 % de los niños y adultos que llegan a tratamiento a Cali no son de Cali», especifica.

Se están diagnosticando unos 9.000 casos nuevos de cáncer y contados son más o menos 20 oncólogos clínicos, lo que da 500 pacientes por oncólogo.

El sistema de salud colombiano, un modelo para el resto de América Latina, posee una cobertura prácticamente universal que alcanza el 96 % y los tratamientos de cáncer están incluidos en el plan obligatorio de salud.

Ramírez destaca la necesidad de trabajar en mejorar algunas áreas claves y así «disparar la sobrevida de pacientes con cáncer» con cambios que no significarían una gran inversión de recursos. Para ello «solo debe existir voluntad política».

Afirma que hay que «tratar de integrar el sistema de salud alrededor del paciente» y que «los medicamentos de la lista de esenciales de la OMS para el tratamiento de cáncer se incluyan de inmediato en el plan obligatorio de salud».

La tercera medida que propone el especialista es la estandarización de los tratamientos.

«Hemos logrado (los oncólogos infantiles) hacer protocolos de tratamiento comunes para la ciudad. Ayudaría si los oncólogos de adultos lo hicieran. Los radioterapeutas ya lo están haciendo».

Eso contribuye a que si un paciente cambia de centro de atención. sea más fácil continuar con su tratamiento. México, 15 nov (EFE)

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