En fotos: Se cumplen 20 años del múltiple asesinato cometido por las AUC en el municipio de San Carlos, Antioquia

Familiares de algunas de las 15 víctimas de la masacre perpetrada por un grupo de las autodefensas el 15 de abril del año 2000, en San Carlos, conmemoraron en la privacidad de sus casas los 20 años de este hecho violento.

Debido a la restricción de actos públicos por la pandemia del covid-19, Ángela Moreno Salazar, una de las líderes y defensora de derechos humanos más reconocidas de este municipio antioqueño, encendió 15 velas junto a igual número de siluetas humanas de papel tomadas de las manos para traer a la memoria a los 15 hombres asesinados. Entre ellos a su hermano, Francisco Luis Moreno Salazar.

Ella lo recordó como “un hombre sencillo que trabajaba en construcción y venía de la obra de una escuela y un puente en la vereda La Leona para la misa de Domingo de Ramos”. Y relató que camino al pueblo “los paramilitares sacaron del bus escalera y otros carros a 15 personas y, a tres de ellos los mataron allí mismo, y a otros 12 se los llevaron”.

Cuenta que durante varios días los buscaron siguiendo la ruta del camión en el que los transportaron y “días después los encontramos en una fosa común con señales de tortura”.

Dice que, aunque saben que los responsables asesinaron “por orden de alias Castañeda y ya han reconocido en audiencias judiciales a varias víctimas, queremos que se conozca toda la verdad, a los autores intelectuales y también esperamos justicia”.

Francisco fue uno de los cuatro hermanos de Ángela que murieron asesinados por las autodefensas y la guerrilla de las FARC, víctimas de la disputa entre los grupos armados que cometieron 33 masacres entre 1988 y 2010 con resultado de 219 víctimas, convirtiendo a San Carlos en uno de los municipios de Colombia más golpeados por el conflicto armado.
Historia de resiliencia

La violencia la desplazó junto a su familia. Pero casi 10 años después esta mujer retornó, al igual que más de 15 mil habitantes que habían huido del conflicto, como señal de la recuperación del municipio y la misma subregión del Oriente antioqueño gracias a la seguridad, la desmovilización de las autodefensas y las FARC y la intervención del Gobierno con acciones como el desminado humanitario, la reparación a víctimas y restitución de tierras.

Entre tanto, las víctimas de masacres de las autodefensas hacen parte de los procesos de la Ley de Justicia y Paz para acceder a la verdad, la justicia y la reparación, que desde la unidad se realiza mediante el pago de indemnizaciones con el Fondo de Reparación, que administra los bienes incautados y entregados por los postulados. Hasta ahora, se han entregado indemnizaciones económicas a 1.725 víctimas por más de 26 mil millones de pesos en cumplimiento de sentencias de tribunales de Justicia y Paz.