Existe un tabú en torno a los tratamientos estéticos en los labios, pues se cree que pueden generar malformaciones en esta delicada zona, pero lo cierto es que se realizan de manera correcta, en centros reputados y con los especialistas indicados, no acarrean ningún problema; de hecho, pueden cambiar de manera positiva su aspecto. “la idea es que la persona que se somete a estos procedimientos se sienta cómoda y, a la vez, logre verse más bonita y armónica sin que se transforme”, asegura Diana Patiño Vanegas, médica de la Clínica Estética Viuté, que se especializó en medicina estética en Argentina.

La boca es el medio por el que articulamos la palabra y nos comunicamos. Ubicada en el tercio inferior de la cara, tiene características específicas que la hacen estéticamente armoniosa: buena definición de su borde en la parte superior y media, apariencia voluminosa e hidratación y brillo.

Sin embargo, su apariencia varía con el tiempo. “En la juventud los labios son voluminosos, más definidos y con menos líneas de expresión, pero a medida que crecemos van modificándose con menos brillo, pérdida de volumen, poca hidratación y, además, aparecen las líneas de expresión”, afirma la médica especialista en estética de Viuté, clínica adscrita a MedPlus, para quien no existe un momento puntual en el que se puedan definir estos cambios aunque están relacionados con el tipo de piel y los cuidados que tenga el paciente. “Hay quienes no se cuidan, se exponen al sol, y en consecuencia tienen líneas de expresión en los labios aunque no llegan a los 30 años, pero hay quienes tienen más de 50 años se cuidan muchísimo y realizan tratamientos preventivos que les permiten mantener sanos sus labios”, asegura la doctora Patiño, que recibe con frecuencia este tipo de casos.

¿Cómo cuidar esta zona de la cara?

Según los especialistas, el peor enemigo para el envejecimiento es el sol así que lo ideal es utilizar bloqueador solar y también es importante consumir líquido ya que esto se refleja en la salud de los labios.

Además, las personas pueden recurrir a tratamientos estéticos que les ayuden a mantener la juventud y lozanía en los labios. Según la doctora Diana Patiño, el más seguro es la aplicación del ácido hialurónico, que se hace mediante una inyección de esta molécula que, aunque es fabricada en laboratorio, es biocompatible, “lo que significa que el cuerpo humano la acepta, la metaboliza de manera natural, no lo rechaza ni genera reacción a cuerpo extraño”, explica.

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La característica fundamental de este ácido es que atrae el agua a los labios y al hacerlo genera volumen a expensas de esta atracción.

Normalmente, el ácido hialurónico viene en una jeringa pequeña con una aguja de un diámetro pequeño. El procedimiento consiste en aplicar un anestésico para evitar molestias durante el tratamiento, luego se inyecta el ácido donde se necesite un moldeamiento del contorno y donde se requiera volumen. “Son pequeños pinchazos pero es absolutamente cómodo para el paciente. El proceso dura aproximadamente una hora y tiene resultado inmediatos”, aclara la médica.

Después del ácido hialurónico

En los días siguientes al tratamiento, la zona se ve más voluminosa y bonita, ya que la molécula comienza a actuar.

“Muchas personas creen que entre más dura el tratamiento es mejor, pero eso es falso. El resultado del tratamiento dura aproximadamente unos 10 meses, eso depende de la hidratación de cada paciente, pero como lo que se usó en el tratamiento es biocompatible, el cuerpo tiene unas sustancias que lo metabolizan y lo absorben de manera progresiva. Este proceso no es tan notorio y sí muy adecuado”, asegura la especialista para quien este es el punto más importante ya que si este ácido hialurónico no fuera biocompatible dejaría de ser seguro y generaría efectos secundarios.

“Hay personas que me piden los labios de Angelina Jolie, pero intento explicarles la lógica y las características de sus labios para que no alteren su estética. Entre más natural sea su boca ve verá mejor, así que la idea es potencializar esa naturalidad”, comenta la doctora Diana Patiño.

De manera complementaria a la aplicación de ácido hialurónico en la boca, se puede aplicar este mismo en líneas cercanas a la boca como en el surco que se forma entre la nariz y la boca, y que al sonreír se hace más notorio, y también de la boca hacia el mentón en las líneas llamadas de marioneta.

Además como en el tercio inferior de la cara se presenta envejecimiento porque se deshidrata con facilidad y hay bastante movilidad de los músculos, hay otros procedimientos complementarios como el láser de rejuvenecimiento. “En este se hace un retiro de la capa más superficial de la piel generando que las capas basales renueven la superficie para que surja una piel nueva, brillante, tonificada y de mejor calidad” asegura la médica.

También existen otros tratamientos estéticos no quirúrgicas para evitar la flacidez como la aplicación de radiofrecuencia. Son equipos que estimulan la producción de colágeno y la tensión para que se logre tonicidad mayor en la zona. Aunque este último procedimiento es muy seguro no se recomienda durante el embarazo.


Fuente: Revista MedPlus
ED 82

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