El atentado de este lunes contra el oleoducto Caño Limón-Coveñas en el municipio de El Carmen, Norte de Santander, tiene en alerta a las autoridades ambientales por el grave daño ecológico que ha causado. Los trabajos de mitigación han sido reforzados por parte de Ecopetrol, con cerca de cien operarios en la zona.
La alerta se ha incrementado dada la posibilidad de que la mancha de crudo llegue al Río Magdalena. Por eso, las autoridades ambientales y la petrolera estatal han instalaron puestos de control y recuperación del crudo en los sectores de Boquerón y el río Simaña, en el sur del Cesar.
De acuerdo con Ecopetrol, los acueductos de al menos tres municipios resultaron afectados con el atentado, que fue atribuido a guerrilleros del ELN.
Nada justifica los atentados contra la infraestructura petrolera, deterioran el medio ambiente y afectan a las comunidades. pic.twitter.com/ZXYK8dkNUd
— Ecopetrol (@ECOPETROL_SA) 29 de agosto de 2017