¿Cómo cuidas tu pelo?

Cada día son más los tratamientos que surgen con el objetivo de fortalecer y mejorar la apariencia física de nuestro pelo. Diversos productos incluyen en sus recetas vitaminas y componentes que pueden beneficiar su apariencia, pero, ¿cómo debe ser realmente el cuidado para que el resultado sea provechoso y estéticamente atractivo?

Tener un cabello saludable refleja conductas de autocuidado. Es necesario revisar el estado del cuero cabelludo y tener en cuenta sus reacciones frente a productos como champús, tinturas, entre otros agentes que pueden intervenir en su aspecto. “Al igual que el resto de la piel, el cuero cabelludo tiene funciones defensivas, de intercambio de líquidos, termorregulación y sensibilidad; además, su salud está directamente ligada al estado de vigor de nuestro pelo”, afirma el doctor Juan Mauricio Betancur López, dermatólogo de la Universidad Nacional de Colombia y especialista adscrito a MedPlus.

De acuerdo con la doctora Luz Helena Pabón, médica dermatóloga experta en láser y cosmética adscrita a MedPlus, “existen diferentes situaciones y patologías que afectan la condición de un cabello saludable. Un ejemplo de ello son las infecciones, las condiciones inflamatorias de la piel, algunas enfermedades como la dermatitis seborreica y psoriasis, y condiciones de contacto por abuso de tintes o agentes exógenos que pueden dañar no solo el cabello sino la piel”. Un cabello saludable es brillante, con las puntas cerradas, manejable, generoso en volumen, vital.

El pelo tiene características generales que pueden definirlo de distintas maneras: sensible, grasoso o seco. Un cabello normal tiene un aspecto suave, brillante, sedoso. Los grasosos suelen verse brillantes pero no sedosos. Y uno seco es quebradizo y su textura es áspera, no hay brillo. “Las sustancias químicas producen un efecto tanto irritativo como tóxico en la piel y la fibra capilar. Debemos asesorarnos de un especialista en dermatología que nos indique qué productos, qué porcentajes de principio activo deben tener y el modo de uso”, indica la doctora Pabón.

La estructura filamentosa de la queratina brinda al cabello ciertas cualidades que le permiten protegerse del ambiente que le rodea: resistencia (fortaleza en el cabello gracias a las células cuticulares que se unen por medio de una sustancia química que las mantiene unidas al córtex), porosidad (facultad que tiene el cabello para absorber líquidos) y elasticidad (capacidad del cabello para estirarse sin romperse) “Las queratinas son un conjunto de proteínas que cumplen una función estructural en el pelo, forman como tal la capa más externa. Por tal razón es importante mantener su viveza”, afirma el doctor Betancur.

¿Por qué se produce la pérdida del cabello?

Agentes infecciosos, quimioterapéuticos en enfermedades como el cáncer, entre otros, pueden causar daños severos en el cuero cabelludo y con ellos, su eventual desaparición. “La pérdida del pelo se conoce como alopecia. Puede ocurrir por muchas causas, entre las cuales hay trastornos inflamatorios, deficiencias nutricionales, infecciones, alteraciones hormonales, estrés físico y sicológico, así como fenómenos fisiológicos”, asegura el doctor Betancur. Suele darse de manera gradual y es común que tienda a suceder en la medida en que el ser humano envejece.

El especialista asegura que las alopecias se dividen en cicatrízales, procesos en donde hay perdida del folículo piloso con formación de cicatrices, y no cicatrízales, donde persiste el folículo piloso sin formación de cicatriz. A su vez, estas categorías se subdividen en alopecias de origen inflamatorio y no inflamatorio.

La doctora Pabón asegura que “el cabello puede tener múltiples enfermedades y pueden llegar a ser infecciosas, bacterianas, virales micóticas, tumorales, inflamatorias, autoinmunes entre otras, como el caso de la dermatitis de contacto”. Por fortuna, el advenimiento de nuevas tecnologías indica el uso de precursores vitamínicos en el tratamiento del cabello, también vasodilatadores tópicos que ayudan a mejorar su aspecto.

Cuando se trata del cuidado capilar, hay ciertos factores que deben tenerse en cuenta en el momento de tomar la decisión de acudir a un especialista. Se recomienda hacerlo si por ejemplo la persona presenta dolor, picazón o enrojecimiento en el cuero cabelludo, estos son signos que requieren una valoración dermatológica. A su vez, un aumento de la caída de pelo o la disminución de su cantidad requieren también una valoración especializada.

También para el caso de que presente acné, si la piel del cuero cabelludo tiene un aspecto enrojecido o si se está perdiendo cabello a temprana edad (entre los 20 y 30 años).

Aspectos a tener en cuenta a la hora de cuidar nuestro cabello

> En cuanto al lavado del pelo se recomienda el uso de champú y acondicionador para dar limpieza y una textura agradable al pelo.

> Los productos utilizados para este fin pueden variar en su composición de acuerdo con algunos factores como cantidad de producción de grasa, alopecia o presencia de caspa.

> No existe una frecuencia estándar para lavado del pelo. En general las personas con pelo grasoso requieren lavado diario, mientras que personas de pelo seco pueden hacerlo 3 a 4 veces por semana.

> El lavado del pelo no es una medida que aumente su caída.

> Los factores físicos son muy importantes en cuanto a la calidad del pelo y su caída.

> El uso muy frecuente de planchas de alisado, secadores y el baño con agua muy caliente deterioran la calidad del pelo y lo hacen más quebradizo, igual sucede con el uso frecuente de tinturas.

> La tracción (peinados muy apretados) y el cepillado vigoroso pueden ocasionar alopecia, en ocasiones, irreversible.

Fuente: Revista MedPlus
ED 89
Síganos en Facebook