Triste, lamentable y alarmante. Así podría calificarse la reacción de un grupo de por lo menos 10 guacamayas durante la alborada de este 30 de noviembre en Medellín.

Las aves, que suelen pasar su noche en el sector de Monticcello, El Poblado, se perturbaron a tal punto que abandonaron el lugar. Hasta el momento solo dos de ellas han regresado.

El video, grabado en el sector por María Cadavid, fue compartido originalmente en el grupo de Facebook de la Sociedad Antioqueña de Ornitología, desde el que rechazaron la costumbre que lleva a los animales a estados de estrés peligrosos para su vida.

Es de recordar que, como lo explicó el Área Metropolitana del Valle de Aburrá en los últimos días, «en un evento como la alborada, las aves huyen de sus nidos por el ruido de los estallidos».

Muchas de ellas abandonan los pichones, que no podrán sobrevivir al no contar con el calor necesario para desarrollarse.

Además, al tratar de huir de las explosiones, algunas aves mueren al chocar con edificaciones y postes. En estos animales son comunes los traumatismos severos, especialmente en los sentidos visuales y auditivos, así como la afectación de las estructuras aéreas, indicó el AMVA.

 

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Redacción Minuto30

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