Las pautas de sueño en los niños son fundamentales para su desarrollo desde los primeros meses de vida. He aquí algunos aspectos que vale la pena tener en cuenta para mejorar sus rutinas de descanso.

¿Hiperactividad?, ¿terrores nocturnos?, ¿hábitos incorrectos?, muchas preguntas surgen cuando se busca una explicación a los periodos de insomnio en los niños, por lo que crear rutinas de sueño es fundamental para que haya un descanso adecuado.

Los ciclos de descanso inician desde el momento en el que el bebé está en el vientre de la madre. De acuerdo con Sandra Zabala, otorrinolaringóloga especialista en trastornos de sueño, “los ciclos en el recién nacido tienen una duración de 50 a 60 minutos. En esa etapa el niño duerme aproximadamente 16 horas al día y el sueño no tiene una organización circadiana (cambios en las variables biológicas con intervalos regulares de tiempo). Es indiferente al ambiente y sus episodios más largos se presentan de forma arbitraria durante el día o la noche, lo que significa que durante las 24 horas del día presenta entre 18 y 20 ciclos de sueño”.

Cuando el niño despierta lo hace habitualmente en vigilia activa y durante estos períodos, llora sin que su llanto esté relacionado con necesidades alimentarias, higiénicas, o con algún malestar físico.

Por tanto, se deben que crear rutinas en torno al sueño, como bañar a los niños antes de acostarlos, leerles un cuento y crear un espacio tranquilo y cómodo.

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La especialista asegura que hay cuatro estados de vigilancia en el neonato: sueño tranquilo (no REM), sueño activo (REM), vigilia tranquila y vigilia agitada. En el momento en que el bebé comienza a dormir realiza pequeños movimientos, respira de forma irregular y a veces hace gestos con su boca; esta primera etapa corresponde al sueño activo.

Luego de una hora aproximadamente el bebé inicia una fase de sueño profundo, que corresponde al sueño tranquilo.En el caso de la vigilia tranquila, el bebé no tiene movimientos fuertes y permanece casi inmóvil, por otro lado, en la vigilia agitada hace bastantes movimientos y sonidos.

¿Cuántas horas deberían dormir los niños?

1. Pueden dormir de tres a cuatro horas seguidas, aproximadamente 16 horas al día.

2. A partir de las cuatro semanas de vida, los períodos de sueño se van haciendo progresivamente más prolongados por la noche y durante el día los períodos de vigilia son más largos.

3. A los 3 meses, los períodos de sueño nocturno son más largos que los diurnos y el bebé puede dormir hasta seis horas continuas.

4. A partir de los 6 meses comienza el sueño tranquilo. La proporción va aumentado con la maduración cerebral y a partir de los 6 meses se pueden diferenciar los tres estados de profundidad del sueño tranquilo.

5. Cuando el niño tiene un año, la duración del sueño nocturno es de 10 a 11 horas. Puede tener dos siestas al día, aproximadamente a las 11:00 de la mañana y a las 2 de la tarde. A los 2 años suele tener una siesta después de almorzar.

6. Hacia los 4-5 años, la siesta de mediodía deja de ser necesaria y cuando llega la noche se duerme rápidamente en un descanso muy profundo.

7. A los 6 años el niño se acuesta más o menos a las 8 de la noche, a diferencia de un niño entre los 10 y 12 años que puede acostarse a las 10 p.m.


Fuente: MedPlus
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